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Pedro Sánchez convoca elecciones generales para el 23 de julio tras el batacazo del PSOE el 28-M

Canarias Noticias - 29/05/2023
Pedro Sánchez en La Moncloa este lunes

Un terremoto político sacude España. El tsunami azul que arrastró al Gobierno este domingo ha llevado a Pedro Sánchez a adelantar las elecciones generales -que se celebrarán el próximo 23 de julio-, porque hace falta una "clarificación sobre la voluntad de los españoles y sobre las políticas que debe efectuar el Gobierno". "Solo hay un método para clarificar dudas. Lo mejor es que los españoles se pronuncien", ha señalado Sánchez en una comparecencia sin preguntas desde Moncloa y visiblemente disgustado tras el varapalo que sufrieron tanto su partido como sus socios de gabinete la pasada noche. El presidente ha asegurado que responde "en primera persona" por los resultados. Y es que el PP superó al PSOE en cerca de 800.000 papeletas.

El PSOE no esperaba los "malos" resultados obtenidos en las elecciones municipales y autonómicas. Solo Castilla-La Mancha y Asturias seguirán siendo gobernadas por los socialistas. La caída de Extremadura y otras cinco autonomías es el termómetro que permite calibrar la magnitud del golpe que se llevó Ferraz y que ha provocado esta reacción del jefe de los socialistas. Ni en los peores pronósticos de Moncloa cabía la posibilidad de que Guillermo Fernández Vara fuera desalojado del poder. Los socialistas, ya en la última semana de antes de votar, se sumieron en el miedo.

La nacionalización de la campaña, planteada como un plebiscito sobre el mandato del presidente, ha jugado en contra de las opciones del PSOE. Por eso, Sánchez mueve ficha y da la palabra a los ciudadanos para que decidan si le quieren al frente de los mandos del país. El jefe del Ejecutivo ha justificado su movimiento en la trascendencia de la coyuntura económica y política que atraviesa el país y el resto del mundo, con la guerra de Ucrania revolucionando el tablero global. El presidente considera que el Gobierno debe tomar aún medidas serias para garantizar el rumbo de España y que por eso, los ciudadanos deben decidir quién las ejecuta.

El equipo de Sánchez no ha sabido dar con la tecla. Moncloa y Ferraz tienen un problema de radar. Ninguno de los grandes anuncios electoralistas de Sánchez, centrados en vivienda, han servido para conectar al Ejecutivo con una mayoría de españoles. El PSOE no solo ha perdido la mayoría de sus comunidades, también algunos de los municipios más importantes, como Sevilla y Valladolid. Tampoco pudieron conquistar Barcelona, la gran plaza sobre la que querían situar la bandera con el puño y la rosa.

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