Supuestas oenegés proanimales y las supuestas proinmigración ilegal, se dan la mano, todas viven de su cuento interminable.
El último caso sobre maltrato animal que supuestas oenegés animalistas dicen que se dio en Timanfaya hace unos días, fue un caso aislado al cual le han dado demasiado bombo y platillo.
Lo que capto del vídeo que hay publicado, es que dos camelleros se sentaron, uno en cada lado de las sillas del dromedario y el animal por ser muy joven, aunque uno de los cuidadores le dio un golpe suave con su mano en el trasero del animal, no pudo levantarse.
Ver vídeo y lo que alega quien grabó la escena del supuesto maltrato animal. Otra que quiso hacerse viral:
Para mí lo sucedido no fue un maltrato animal sino un pequeño error por parte de los que cuidan los dromedarios en dicho paraje.
Maltrato animal que pocos denuncian, es la matanza discriminada de cabras salvajes que se ha llevado a cabo en los últimos años en Gran Canaria.
Ver noticia de la matanza de cabras en Gran Canarias que 19.000 firmas han protestado contra semejante crimen y abuso animal:
https://www.eldiario.es/canariasahora/sociedad/rechazan-matanza-salvajes-gran-canaria_1_4059305.html
También vestir a perros con ropa de humanos y con decoraciones como si fueran niños o niñas, y obligarlos a actuar casi como personas es otro maltrato que los animalistas no denuncian; y menos que en Canarias solo quedan unos cuantos burros y caballos por causa de que si no se obtiene beneficio de ellos nadie quiere tener un animal en su casa o en su finca porque le cuesta unos 300 euros ponerlo en regla, más alimentarlo, asearlo, pasearlo y limpiar sus excrementos.
Me parece bien que se reclame que los dromedarios habidos en Timanfaya se traten mejor, que tengan bozales idóneos y que estén provistos de zonas con sombra y agua. Pero de ahí a que se diga que son maltratados, hay un abismo.
Si los dromedarios desaparecen de Las Montañas del Fuego, en menos de 3 años desaparecerán de Lanzarote igual como han desaparecido el 95% de los asnos que había hasta hace unos 40 años. O igual como desaparecieron los caballos militares hace unos 50 años.
Todo mundo es un maltratador de animales queriendo o sin querer, porque les robamos su territorio salvaje según nos multiplicamos.
Dentro de unos 60 años los pocos animales salvajes que queden en el mundo pasarán a ser protegidos en granjas y zoos, y solo se reproducirán en dichos sitios.
En el mundo, aunque no deseemos que así suceda, ocurrirá tal como digo por causa de que la población va en aumento de forma incontrolable, como ya está sucediendo en muchos estados de EE. UU y en otras naciones donde muchos animales salvajes por haber perdido su hogar están tomando las calles como territorio suyo.
Donde si se abusa de los dromedarios y camellos es en África, lugar donde los tuaregs con sus caravanas cruzan desiertos de miles de kilómetros con dichos animales cargados y con poca agua y poca comida. Y los animalistas no dicen ni pío, igual como cuando Repsol quiso hacer prospecciones en aguas cercanas a Canarias, y que Greenpeace no tuvo la honradez de protestar contra Marruecos que estaba llevando a cabo prospecciones en cientos de cuadriculas situadas en aguas marroquíes y saharauis.
La hipocresía relacionada con la defensa de los animales y de la inmigración ilegal está ligada a las subvenciones que reciben las oenegés manipuladoras.
