Esto es lo que hay
Su currículo va aumentando cada dia. De un aspirante a pseudoplagiador amenazador, experto en GPS y Falcones, ha pasado ya a la eternidad como un gran exhumador. Continua demostrando que es experto en muchas otras cosas, como en colchones y jamones serranos extremeños, amén de sus perlas cultivadas, como con lo de la Fiscalia. Mientras Abascal, Casado y Rivera continuaron el domingo 03.11. con su campaña electoral, él canceló su presencia en los mítines para preparar el debate del 04.11. El resultado fue que un 80% de lo que dijo en el debate fue balbuceando, leyendo a duras penas lo que le habian escrito, y sin casi levantar la mirada de sus cuartillas.
Su entorno no tiene pérdida. Una vicepresidenta caracterizada por tener dificultades para diferenciar lo verdadero de lo ficticio. Un Ministro del Interior que parece desconocer lo que el cargo conlleva. Mientras Lastra no explica en donde ha trabajado, porque „no habla de su vida privada“, los Ximos (que rima con timos), Griñanes, Chaves, Diaz y demás Monteros nos dan lecciones de lo muy demócratas que son, con espantadas incluidas. Mientras Sánchez dijo no sé que cosas de „no decentes“, resulta que se mira para otro lado con los eres, las vacunas de la gripe y la utilización de puticlubs por algunos, al parecer, con el dinero de los contribuyentes.
Luego está la reunión de los pseudosuplantadores de Estado en Barcelona (junto a la vergonzosa foto con Torra); lo de Otegui; lo de los pseudoacuerdos con los separatas catalanes, la farsa de trasladar a los aspirantes a golpistas a cárceles catalanas, y el rasgarse las vestiduras, saliendo en defensa de los muy fiables del PNV, así como el negar que una nueva crisis económica (peor que la negada por Zapatero) está a la vuelta de la esquina, demostrando su incapacidad para gobernar y hacerla frente, pues una subida de impuestos sería contraproductiva.
Pero nada de todo eso importa. Lo importante, lo esencial, es que los „Telefakes“ de TVE (ya saben, la de todos) nos sigan dando imágenes y entrevistas con un Sánchez repitiendo a piñon fijo eso del gobierno progresista, que ni él mismo sabe lo que es. Como tampoco él y su entorno socialista saben decir cuántas naciones hay en España.
Sí, progresista y y progresisto, para todos y todas, que, allá ellos y ellas, se dejon y dejan engañar. Pero que luego no se quejen.
