Tomar proteínas vegetales, la opción más saludable
La ingesta de proteínas vegetales se está expandiendo en un gran sector de la población. Ya sea por motivos de alergias, por razones de conciencia o simplemente porque se prefiere comer de forma más sana y adecuada, lo cierto es que cada vez más personas eligen consumir estos nutrientes de alimento de procedencia vegetal.
Cada vez más personas se preocupan conscientemente de su alimentación y este giro en lo que se come pasa por conocer a fondo las propiedades de los alimentos. En concreto las proteínas vegetales son uno de los términos que más se utilizan en la actualidad para referirse a dietas en las que se da preferencia a los alimentos vegetales naturales y frescos.
La proteína vegetal, como su propio nombre indica, es un nutriente que procede de alimentos que no son carne, pescado o derivados de alguno de ellos. Las proteínas son esenciales para el desarrollo y el crecimiento del cuerpo, así como para la reparación de los tejidos. Además, juegan un papel fundamental en la función energética, es decir, aportan energía al cuerpo. Las proteínas son saciantes y tienen un contenido calórico bajo.
La opción más saludable es obtener las proteínas que el cuerpo necesita mediante alimentos que no sean de origen animal. Las proteínas vegetales son muy beneficiosas porque aportan gran cantidad de fibra y apenas tienen colesterol. Están presentes en alimentos como las algas, los frutos secos, los cereales y las legumbres. Estos productos suelen tener menos cantidad de proteínas que los alimentos de origen animal, por ello es imprescindible que se combinen entre sí para que la dieta sea lo más equilibrada posible y se produzca una ingesta adecuada de aminoácidos.
Alimentos ricos en proteínas vegetales
Existen multitud de productos de los que se puede obtener proteína vegetal, como es el caso de la harina de garbanzo. Este producto procede de la molturación del grano de garbanzo seco y es muy destacable su alto contenido de proteína y de fibra.
La harina de garbanzo ofrece grandes beneficios nutricionales y se puede utilizar en muchísimos preparados. Por ejemplo, es la base de las deliciosas tortitas de camarón, y también se utiliza para que los rebozados queden muy crujientes. En cuanto a su uso en las elaboraciones de repostería, destacar que con ella se pueden hacer galletas y también sirve como harina base para la confección de bizcochos.
Es una excelente opción para las personas que tienen alergia o intolerancia al gluten y se utiliza también como sustituto del huevo en las dietas veganas. Esto se debe a que produce texturas esponjosas y sabores suaves, con lo que se pueden cocinar unas tortillas veganas realmente apetecibles.
Otros alimentos muy ricos en proteínas vegetales son los frutos secos, las semillas, la levadura de cerveza, el brócoli o la harina de trigo sarraceno. Esta última es una harina libre de alérgenos, sin gluten, por lo que su uso es ideal para la preparación de masas para pizza, panes caseros o la elaboración de deliciosas galettes (crepes realizadas con trigo sarraceno) dulces o saladas. En repostería también se utiliza para elaborar dulces combinada con otros cereales.
Este tipo de alimentos son unos grandes aliados en la cocina, ya que están libres de gluten y son muy fáciles de preparar.
Existen otros preparados saludables y sin alérgenos especialmente formulados para elaborar productos saludables sin gluten, como preparados de tempura, harina multiusos o preparados para hacer pan.
Proteínas amigables con el medio ambiente
Para quienes consumen de forma habitual solo proteínas vegetales una de las características que encuentran más ventajosa es que la obtención de estas proteínas es más sostenible con la naturaleza y el medio ambiente. Esto es así porque para producirlas no es necesaria tanta cantidad de recursos naturales como pueden ser el agua. También es interesante destacar que su producción emite una menor cantidad de gases de efecto invernadero, en contraposición con la gran cantidad de agua y recursos que requiere la ganadería.
