El Gobierno sigue comprando material policial para Marruecos: 90 quads 4x4 por 1,48 millones
En los últimos seis meses ha gastado más de 10 millones en el país alauí, pese a que Guardia Civil y Policía Nacional necesitan mucho material.
Marruecos sigue inmerso en un proceso de modernización de sus fuerzas de seguridad, pero con dinero que no está saliendo de sus arcas. El Gobierno de Pedro Sánchez sigue comprando material policial al país norteafricano con el dinero que recauda de todos los españoles, pese a que todo hace indicar que las arcas nacionales no están muy boyantes. Y pese a que la Guardia Civil y la Policía Nacional también tienen importantes necesidades de nuevo material.
La última compra que está en marcha acaba de ser licitada y publicada hace unos días en el portal de Contratación del Estado. Se trata de un contrato de 1,48 millones de euros para la compra de 90 quads 4x4 para el Ministerio del Interior marroquí, que están destinados, según la explicación gubernamental, al control de fronteras y del tráfico de inmigrantes en el país alauí. Una adquisición que se divide en dos lotes diferentes.
El primer lote está compuesta por 30 unidades con cambio automático y tendrá un coste total de 390.042 euros. Es decir, cada una de las unidades tendrá un coste unitario de 13.068 euros e incluye el propio quad 4x4 con cambio automático, la garantía técnica, un pequeño servicio de formación para el mantenimiento de los vehículos y los costes de la entrega de los mismos directamente en la ciudad marroquí de Tánger.
El segundo lote está compuesto por 60 unidades con cambio manual y tendrá un coste total de 1.089.000 euros. En este caso el coste unitario de cada vehículo asciende hasta los 18.150 euros y, al igual que en el anterior lote, también se incluye la garantía técnica, la formación para el mantenimiento de las unidades y la entrega del producto en suelo marroquí, en la misma ciudad norteafricana.
El concurso lanzado por el Gobierno español favorece aquellas propuestas de venta en las que se incluyen dentro del pack de cada quad otros accesorios como casco, guantes, maletas con barra fijadora (top case) y un lote de piezas de recambio que incluya filtros de aire, filtros de aceite, correas de trasmisión, cardos completos, pastillas de freno, kit de rodamientos de rueda, kit de rodamientos de dirección, amortiguadores y kit de drenaje.
Las compras a Marruecos de España y la UE
El organismo encargado de la compra es la Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administración Políticas Públicas (FIIAPP), un organismo dependiente del Ministerio de Exteriores, que ya compró el pasado mes de noviembre 130 vehículos nuevos marca Toyota para las Fuerzas de Seguridad alauíes por el módico precio de 8,6 millones, en un momento en el que se acababa de conocer que la Guardia Civil tenía más de 2.000 vehículos que habían recibido un informe desfavorable en la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) durante 2020.
Esa compra de 130 vehículos estaba dentro de un programa europeo por el que España iba a comprar a través de la FIIAPP un total de 384 vehículos: 230 vehículos 4x4 tropicalizados (con aire acondicionado preparado para altas temperaturas), 100 vehículos 4x4 tipo pick up, 10 vehículos 4x4 configurados como ambulancia, 10 camiones 4x4 cisterna para agua, ocho camiones cisterna para gasolina, y 18 camiones 4x4 plataforma. También cinco radares marítimos, 10 GPS portátiles, 10 sistemas de identificación automática, radios, tabletas y varios sistemas de cartografía.
De manera paralela, la Unión Europea, a través del Centro Internacional para el Desarrollo de Políticas Migratorias (ICMPD, por sus siglas en inglés), ha entregado ya al Gobierno marroquí casi 200 vehículos policiales polivalentes de la marca FIAT, totalmente nuevos y entregados también en el país magrebí, a los que se unirán en una fecha todavía no determinada otros 337 vehículos.
El organismo europeo también tiene previsto comprar al país alauí un total de 5 vehículos aéreos no tripulados, lectores de huellas dactilares, ordenadores, cámaras, lanchas rígidas y cinco radares marítimos, siempre con el mismo supuesto objetivo, el control de las fronteras y el control del tráfico migratorio.
El Gobierno de Rabat reconoció a finales de diciembre de 2019 que hasta ese momento habían recibido más 1.300 vehículos nuevos pagados por la UE o sus países miembros. Con las compras españolas ese número supera ya con creces los 1.500 vehículos nuevos.
La carrera armamentística marroquí
Marruecos siempre argumenta que no tiene dinero suficiente para invertir en seguridad si quiere aumentar el nivel de vida de sus ciudadanos pero, sin embargo, lleva varios años en plena carrera armamentística con Argelia, gastando cantidades ingentes de dinero, y adquiriendo material moderno, recortando año a año la distancia en capacidades militares que le separaba de España.
En los últimos meses se viene rumoreando la posibilidad de que se lance a la compra de cazas de combate F-35, inalcanzables ahora mismo para el paupérrimo presupuesto militar español, y que se uniría a los compromisos alcanzados para la compra de cazas de combate F-16 Block 72 (una de las versiones más modernas), helicóptero de ataque AH-64 Apache, misiles antitanque TOW 2A y carros de combate Abrams M1A1.
También ha modernizado sus ejércitos con sistema de artillería 155mm sobre camiones César, baterías antiaéreas FD-2000B de fabricación china –mientras sigue negociando la compra de baterías antiaéreas Patriot con Estados Unidos–, fragatas de la clase SIGMA y de la clase FREMM, y rastrea el mercado en búsqueda de submarinos –todo apunta a los Kilo rusos– y negocia con Israel la compra de aviones de reconocimiento e inteligencia Gulfstream G550.
La carrera armamentística entre Marruecos y Argelia está siendo de tal magnitud que incluso el grupo parlamentario de Vox pidió en el Congreso a finales de octubre la compra de 200 misiles y dos submarinos más de la serie S80, entre otras adquisiciones, para garantizar que España pudiese defender el sur del país en caso de conflicto.
