ÚLTIMA HORA

Encendido de Navidad del Cabildo de Gran Canaria y su Belén (VÍDEO)

Canarias Noticias - 10/12/2020
Cabildo de Gran Canaria/ canariasnoticias.es

El Cabildo homenajea a la población del campo de Gran Canaria de hace un siglo en el tradicional Belén de su fachada para subrayar el esfuerzo que realiza el sector primario para abastecer a la isla por difíciles que sean las circunstancias, subrayó el presidente de la Institución insular, Antonio Morales, durante su inauguración y el encendido de la novedosa iluminación con micro led que decora la sede del Gobierno insular. 



El portal creado por el artesano Fernando Benítez está ambientado en el entorno rural de Gran Canaria en la transición del siglo XIX al XX y lo integran más 100  figuras de terracota, una decena de ellas mecanizadas y de las que casi 60 representan a personajes de oficios ligados al campo ataviados con trajes de faena de lino e hilo, los tejidos propios de la época, mientras que el resto son animales.

El recorrido comienza con la recreación del Cenobio de Valerón, el granero aborigen más importante de Gran Canaria y un guiño a la raíz prehispánica de muchos de los usos del campo insular, lo que deja paso al tránsito de un rebaño de ovejas cuya estampa evoca los paisajes y quesos de Moya y las zonas altas de Gáldar y Guía.

A continuación entra en escena la alfarería, que formaba parte indisoluble de la vida en el campo con tinajas y tallas como las que modelaban Rafaelilla o su hija Julia en Hoya de Pineda o Panchito en La Atalaya de Santa Brígida, igual que las hechas en Lugarejos, que resultaban imprescindibles para la conservación del aceite o los salazones.

La vitalidad del campo grancanario queda plasmada también en el harinero, el panadero que saca las hogazas del horno y el carretero que reparte el pan para hacerlo llegar a todos los rincones con la única ayuda de sus piernas y sus brazos, y también en la matanza de cochinos negros, uno de los cuales se dora al fuego en el obrador mientras el carnicero despieza un ejemplar y las mujeres aprietan los chorizos y morcillas.

El público también podrá apreciar a través de la cristalera del escaparate del Cabildo una cogida de papas y vacas que pastan en las medianías junto a un barranco flanqueado por piedras cubiertas de musgo y por el que corre el agua, igual que ha hecho estos días en varios puntos de la isla gracias a las lluvias. 

El Belén incluye muestras de la arquitectura tradicional que se manifiesta en gallineros construidos con tablas sobrantes que adoptaban formas casi inverosímiles, casas de piedra típicas de Azuaje o el Barranco de la Virgen y de las que ya apenas quedan uno o dos muros en pie y que Fernando Benítez ha reconstruido gracias a fotos antiguas, la Iglesia de San Mateo y una ermita anónima que podría ser cualquiera de las incrustadas en las medianías.

Al fondo del conjunto escénico, representados con piezas de menor tamaño que el resto para lograr la sensación de lejanía, los Reyes Magos buscan al Niño Jesús subidos a sus camellos y lo encontrarán finalmente en el pesebre, donde San José, emocionado, lo arropa entre sus brazos mientras la Virgen María descansa tras dar a luz al Mesías.

Tras la eclosión de la vida que encarna el recién nacido, el Belén tiene como broche una escena de cuidados en la que una mujer vierte agua delicadamente con una jofaina sobre la cabeza de un hombre mayor y enfermo. 

El decorado navideño de la sede del Cabildo lo completan el árbol del patio, en esta ocasión una ligera estructura metálica que sustituye al pino de entresaca de años anteriores, y la iluminación que enmarca el edificio con 500 metros de cortinillas de 90.000 bombillas micro led que parpadean en las cornisas y dibujan estrellas sobre su torre para arrojar claridad sobre las postrimerías de 2020 y los albores del 2021. 

Noticias relacionadas

Noticias más leídas del día