Hygge: cómo ser feliz de manera simple desde casa
La palabra danesa Hygge surgió en el siglo XIX y es la derivación de un término noruego sin traducción literal en otros idiomas. Sin embargo, para comprenderla tienes que saber que su significado es similar al concepto Gemutlichkeit del alemán y al sentido de diversas palabras pertenecientes a la religión budista, que se refieren al bienestar que puedes alcanzar en relación a tu contexto, los afectos y sobre todo el cuidado y aceptación de tu propia persona.
El Hygge es una filosofía que señala que debes encontrar la felicidad en las cosas simples, dentro de un hogar cálido y acogedor, pasando tiempo en pequeños grupos y relajándote en solitario, olvidándote del stress y los problemas de la vida diaria. Esto te ayudará a alcanzar un estado de felicidad y paz interior.
¿Cómo puedes lograr el estado Hygge?
Si bien cada persona tiene sus maneras particulares de alcanzar un estado de armonía, tú puedes tener en cuenta las siguientes ideas generales como referencia para encontrar tu propia forma de ser feliz:
Crea un ambiente acogedor
La comodidad es elemental para que puedas tener experiencias hyggeling así que debes prestar atención al ambiente. Escucha música de fondo tranquila que te ayude a estar relajado, prende velas para tener una iluminación tenue y coloca flores en distintas superficies para sentir su aroma y deleitar tu vista. En la medida de lo posible, construye un hogar a leña en la sala y viste tus pisos con alfombras de textura suave y acolchonada. Comprar puertas para casa fabricadas en madera es lo mejor para evitar las aberturas de metal que dan sensación de rigidez y frialdad.
Selecciona bebida y comida reconfortante
Recurre a bebidas calientes que sean relajantes. Algunas buenas opciones son las infusiones de cúrcuma y jengibre, cualquier té de hierbas y el chocolate caliente. ¡Evita el café instantáneo! Prepara recetas familiares que te hagan recordar buenos momentos con tus abuelos y padres, en lo posible en compañía de seres queridos. Para complementar una rica cena puedes beber un vino fino.
Ponte cómodo
Quédate un rato en pijama cuando salgas de la cama o usa ropa cómoda para estar acurrucado en el sofá. Dentro de tu casa nunca uses calzado. Si utilizas abrigos amplios y medias de motivos graciosos, mucho mejor. Acomoda los cojines para tomar una breve siesta y juega en el suelo con tus mascotas.
Si tienes césped en el jardín delantero o el patio trasero, no dudes en caminar descalzo por allí y sentir el suelo bajo tus pies. Si puedes, pon tus manos en la tierra y frótalas para sentir cómo esta se desgrana y escurre entre tus dedos. Estar en contacto con la naturaleza te llenará de buena energía.
Sal a caminar
En principio parecería opuesto a la filosofía de estar cómodo en casa, pero es importante que contrastes realidades para que valores tu riqueza. Camina por el vecindario observando el vertiginoso movimiento de las personas por las calles hasta que estés cansado y sientas la necesidad de volver a tu casa. Cuando entres, veas tus puertas de interior en madera y sientas el calorcito de tu hogar, reconocerás que tu ambiente es hygge y te sentirás bien automáticamente. Sé consciente de que es un momento y un espacio para disfrutar.
Organiza reuniones en tu casa
Convoca a un grupo reducido de amigos o familiares y aprovecha el tiempo platicando sobre temas alegres y jugando a entretenidos juegos de mesa. Evita tocar temas controversiales, hablar de política o pasar horas quejándote de tu trabajo. Procura aclarar esas pautas de convivencia para que todos las respeten.
Recuerda que el punto justo de personas a invitar es aquel en el cual la sala no esté abarrotada de gente y se puedan todos mover sin dificultad, pero no haya demasiado espacio vacío alrededor de cada uno. La cercanía física hará que cada uno de los invitados se sienta cómodo como en casa.
Si creas un ambiente especial para tus visitas, será aún mejor, para que mantengas tu privacidad intacta. Tener puertas de interior en madera resulta mucho más conveniente que otros materiales, ya que son livianas, con diseños muy variados, no requieren de mantenimiento y combinan con todo.
Dedícate tiempo a ti mismo
Crea rutinas de cuidado personal, y llévalas a cabo por la mañana y por la noche. Incorpora hábitos saludables tales como un buen desayuno, limpieza facial, meditación y escritura en diarios de gratitud. Otras ideas productivas que puedes aplicar son hacer un vision board recurriendo a la técnica del collage y pasar tiempo diseñando tu bullet journal.
Realiza actividades que te gusten y contribuyan a tu desarrollo personal. Una buena opción es la lectura de libros en físico. Aléjate de las pantallas de cualquier tipo y sobre todo apaga el teléfono móvil para evitar distracciones.
Puedes crear un espacio en casa exclusivo para esa actividad que tanto te gusta. Existen puertas de madera para interior que transmiten mucha paz, perfectas para que pases tiempo en silencio sin ninguna preocupación externa.
