Si no es por unas 30 monedas de plata, si da la impresión que, con el fin de aprobar unos míseros seis decretazos y decretazas socialos y socialas, creyendo que así obtendrán más votos en las elecciones, es para, en compensación, traspasar muchas competencias, a cargo de los contribuyentes, al PNV, Bildu y los separatistas catalanes.
Es evidente que la inteligencia de algunos, demostrada por su habilidad con los GPS y su comportamiento en recepciones oficiales, solo da para intentar desenterrar a muertos, amenazar a periodistas y a otros con su „os vais a enterar“, junto a 110 brindis al sol y otras falacias para engañar a los ciudadanos. Pero alguien les deberia decir que los que juegan con fuego pueden quemarse y que a los españoles, como la historia ha demostrado, no les gusta demasiado que les tomen por tontos, sobre todo, por algunos que no pueden serlo más porque, simplemente, no pueden.