Se trata de una figura imprescindible para cualquier empresa que quiera lanzarse o posicionarse en el mercado internacional. Su poder de negociación con las navieras y su experiencia en actividades propias de la exportación e importación, resultan fundamentales para tener operaciones comerciales exitosas, sobre todo ante los nuevos desafíos que supone el 2020.

Las operaciones de comercio exterior en España han experimentado un crecimiento lento pero ininterrumpido en los últimos años. Entre enero y agosto de 2019, por ejemplo, las exportaciones de mercancías se incrementaron un 1,1% respecto al mismo periodo del año anterior, alcanzando su máximo histórico: 192.131 millones de euros, de acuerdo a los datos de Aduanas, dependiente del Ministerio de Hacienda.

Las miles de operaciones diarias de exportación e importación, dependen de un sinfín de detalles propios de la actividad comercial internacional, tan complejos como la recogida de contenedores, entrega en almacén, trámites aduaneros, almacenaje, carga y descarga de contenedores en el buque, etc. 

Esta complejidad es justamente la que hace imprescindible contar con un Transitario con experiencia. “Nuestros clientes que importan o exportan productos nos usan para estas gestiones para poder ocuparse de hacer crecer su negocio y no de todos los papeles relacionados con la importación y exportación”, comienzan a explicar los responsables de AM Cargo, un referente entre las empresas transitarias, con capital 100% español y una dilatada experiencia. “Hoy en día el papel del transitario sigue siendo muy relevante porque somos imprescindibles para que una importación o exportación tenga éxito”, aseguran estos profesionales. 

Aunque oficialmente cualquier empresa que importe o exporte productos en España no requiera un transitario, en la práctica se comprueba que es imposible no contar con sus servicios si lo que se quiere son operaciones de comercio internacional exitosas, sobre todo a la hora de la negociación. “El sector del transporte marítimo de mercancías y transporte aéreo de mercancías no ha avanzado a la misma velocidad que el del transporte de pasajeros y siguen siendo los transitarios quienes tienen el poder de negociación con las navieras”, indican desde AM Cargo. 

La figura del transitario podrá dedicar el tiempo necesario para coordinar todas las actividades necesarias para realizar el transporte y la comunicación entre todas las partes implicadas, mientras que el empresario evita demoras y trámites burocráticos. Esto se traduce en agilidad, y ahorro de tiempo y dinero. 

Una respuesta para cada pregunta

Cualquier empresa que haya intentado dar sus primeros pasos en el comercio internacional, e incluso aquellas que llevan ya algún tiempo haciéndolo, suelen encontrarse con dudas, preguntas, cambios de normativas y siglas o términos desconocidos. CMR, Air WayBill (AWB), ATR, Intercom, FCL, LCL, EORI, Tracking, Shipping, Packing List, Incoterms…son algunas de las muchas formas del lenguaje propio de la logística, la exportación y la importación.

Por supuesto, es demasiada información y es necesario aclarar todas las preguntas de transporte internacional antes de empezar a concretar operaciones. Aquí es donde comienza a cobrar relevancia el papel de una empresa transitaria, que maneje estos y otros términos con la fluidez propia de quien conoce el terreno en el que se mueve. 

Nada deja más tranquilo a un empresario que poner en manos de expertos, el éxito de una operación comercial internacional. 

La mejor forma de cumplir términos y condiciones

Como cualquier otra operación comercial, la exportación y la importación tienen sus propios términos y condiciones. Se trata de los Incoterms (acrónimo del inglés Internacional Commercial Terms). 

Gracias a estas estipulaciones de la Cámara Internacional de Comercio, es posible definir las responsabilidades y obligaciones tanto del comprador/exportador como del vendedor/importador.

Hasta aquí, todo claro. El problema surge con las interpretaciones de estos términos, ya que cada país hace la suya. Para evitar confusiones y malos entendidos, que pueden traducirse en pérdidas o sanciones millonarias, el transitario dispone de diferentes herramientas y está actualizado permanentemente con el marco legal, la forma más simple de cumplir con los trámites y normas, las últimas novedades del comercio internacional y el régimen aduanero.

Cambios y novedades 2020

Los Incoterms 2020, suponen una necesaria renovación en pro de la seguridad y agilidad en el transporte de las mercancías de un país a otro.

Los principales cambios atañen a DAT (sustituido por DPU o “Delivered at Place Unloaded”), CIF y CIP, FOB (Free on Board) pasa a ser usados únicamente en el transporte de contenedores por vía marítima y FCA (ahora permitirá proveer de copia de conocimiento de embarque al banco que gestiona el crédito documentario), entre otras.

Entre las nuevas estipulaciones de los Incoterms y el desafiante panorama del 2020 ante la crisis mundial por la pandemia del Covid-19, quienes intenten dar sus primeros pasos, crecer o incluso sobrevivir en un comercio internacional lleno de retos, deberán echar mano de la experiencia y el asesoramiento profesional de un transitario. Definitivamente, nunca ha sido tan necesario como ahora.